En relación a la última entrada del blog, sobre los nuevos espacios de juego, que en teoría nos permitirá desarrollar un juego con defensas más abiertas y más espacios para los atacantes, deberíamos tener en cuenta un factor fundamental que nos permitirá desarrollar el juego que nosotros queremos.
RECIBIR ATACANDO
Hace poco le hacía una entrevista en El País, a Aíto García Reneses, en el que decía que el baloncesto actual se está convirtiendo en rutinario y previsible, (os dejo el enlace de la entrevista que merece la pena leer), en cierta parte estoy bastante de acuerdo, Aíto, hace referencia a que el estudio sobre los rivales, jugadores, sistemas de juego, scouting, contrascouting... está dejando poca margen de improvisación e inventiva a los equipos, ya sabemos que cuando marque una jugada va a acabar en un bloqueo directo o en un aclarado para determinado jugador, lo qu ea mi me parece bastante contradictorio... S i los entrenadores estamos basando casi todo nuestro juego en la capacidad de desequilibrio de los jugadores en el 1x1 o en el 2x2... ¿Por qué hemos de maniatarlos en cada ataque para que el balón le llegue a ese determinado jugador?
Entenderme bien, yo no creo para nada en los equipos que mandan "LIBRE" y que se apañen los jugadores... Eso es un pequeño suicidio de los propios entrenadores a la vez que una falacia, nadie pone a 5 jugadores en el campo sin orden ni concierto, tú entrenas algo durante la semana que después se pone en práctica en la pista, entrenas unas normas, ocupación de espacios... Por tanto la palabra "libre", no tiene cabida ahí...
Como ya sabéis tod@s, a mi gusta que los cinco jugadores que están en el campo sean partícipes del ataque y que sean valientes a la hora de tomar decisiones y el baloncesto actual se basa sobre todo en desajustar defensas para luego castigar con pases, ahí tenéis el estilo de juego de Messina o Zeljko Obradovic, que haciendo unos inicios de juego bien sencillos circulan el balón como nadie, hasta encontrar al jugador que está sólo.
Por tanto, si unimos todas las reflexiones anteriores, que queremos un baloncesto más dinámico, menos previsible y sobre todo más vistoso y cómodo para los jugadores, es necesario que estos, sean capaces de atacar y tomar decisiones.
El fundamento técnico que mayor aplicación tiene y más directa a la táctica colectiva, si queremos desarrollar este tipo de juego dinámico, es el de RECIBIR ATACANDO. En el baloncesto actual, con todas las modificaciones del tiempo que ha habido, de 30 segundos a 24 y ahora a 14, cada vez caben menos los jugadores que emplean tantas fintas de salida, botes... En definitiva, los jugadores que paran los ataques de los equipos, cada vez irán quedando más obsoletos.
Tenemos que ser capaces de entrenar a jugadr@s que puedan trasladar el balón de una parte del campo a la otra lo más rápido posible y que tengan entre ceja y ceja el objetivo de atacar la canasta, en definitiva, ser buenos y determinantes en el 1x1. Soy de los que dice que al más alto nivel, llegan los jugadores que son capaces de desequilibrar y anotar, hay buenos jugadores de equipo como Carlos Jiménez, Felipe Reyes o Toni Kukoc en su día (no es mi intención para nada compararlos entre ellos) pero parece que a los entrenadores, cada vez nos cuesta más creer en el talento joven y en los jugadores emergentes de las canteras, luce más tener a uno que su nombre acabe en "IC"o "ISON" y es por ello, que estos jugadores jóvenes deben de ser capaces de hacer y generar cosas positivas para el equipo con el balón en las manos.
Yendo al grano... Seamos capaces de construir equipos, en los que los doce jugadores sean capaces de atacar la canasta y que su baloncesto sea imprevisible e indefendible para los demás.
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